Hunger Strike: El futuro que solía ser

Chris Cornell la había escrito pero tenía problemas al interpretarla.

El cantante de Soundgarden sentía que algo le faltaba a “Hunger Strike”, una canción que había compuesto para su proyecto Temple of the Dog que estaba casi listo. Cornell sentía que el sonido era  falso, irreal. Fue cuando llegó Eddie Vedder, surfista y empleado de una gasolinera, que estaba haciendo audiciones para un grupo que se llamaría en Pearl Jam.

Todo cambió al momento en que se unieron Cornell y Vedder; así lo describe el primero en una entrevista que tuvo en 1991 en KISW 99.9 FM en Seattle, donde se estaba gestando un movimiento llamado “grunge“” que pondría el clavo final al ataúd del glam-rock de los ochenta.

“Yo empecé cantando algunas partes, él se acercó al micrófono y comenzó a cantar las partes bajas para mí, porque vio que era un poco difícil. Seguimos haciéndolo a través de un par de coros entre nosotros , de repente pensé ‘la voz de este chico es increíble’.

“La historia se escribió sola después de eso, la canción se convirtió en sencillo. No era realmente la forma en que yo estaba acostumbrado a cantar, pensé que su voz encajaba muy bien con esa canción, consideré que sería genial hacer un dueto”, relató Cornell.

El dueto se consumó en “Hunger Strike”.

La canción es completamente política: no importa robar el pan para darlo a los pobres, que en la melodía son descritos como las bocas de la decadencia. Nadie puede alimentarse de los impotentes desde las mesas con comida… se corre el riesgo de que la sangre de los asfixiados la ensucie ¿La solución? La huelga de hambre, que da el título a la canción.

En materia musical, “Hunger Strike” comienza con una guitarra que acompaña una voz de Cornell sombría con destellos de desperación, el canto de Vedder complementa esa angustia. Poco a poco, los sonidos llegan a una cima donde solo la guitarra instala una meseta sónica que culmina en un duelo de voces entre ambos vocalistas.

“Hunger Strike” formaría parte del disco homónimo de Temple of the Dog, un proyecto concebido por Cornell por la muerte de Andrew Wood, vocalista de Mother Love Bone. La alineación era, además de Cornell y Vedder,  Stone Gossard, Jeff Ament, Mike McCready y Matt Cameron… quienes después formarían Pearl Jam.

El disco de Temple of the Dog se aleja del rock agresivo de Soungarden y Pearl Jam, tienes sonidos más melódicos y lentos y el blues se asoma en la guitarra  y voces en muchos momentos. La grabación no tuvo éxito hasta que Pearl Jam lo tuvo hasta 1992, año en que, irónicamente,  el proyecto había sido disuelto. Vendió un millón de copias aproximadamente.

La canción “Hunger Strike” se interpretaría muchas veces con Vedder y Cornell o bien en sus grupos respectivos. La última vez que se escucharían sus voces juntas sería el 26 de octubre de 2014. Cornell sería encontrado muerto el 18 de mayo de 2017, se había quitado la vida por ahorcamiento.

El grunge, cuya popularidad más alta fue de 1990 a 1996 y llevaría el desencanto y apatía al estrellado, cerraría sus puertas con sus representantes como Soundgarden, Nirvana y Alice in Chains. Pearl Jam se mantiene como una banda activa de rock y sigue llevando feligreses a su templo.

Los espacios de futuro cambiaron.  De pronto, como una fragancia distinguida, el futuro se desvanece en algo que no solía ser, los fantasmas llegan con la muerte de los héroes y los gritos de desolación toman forma en la vida real ante la muerte.

El templo de ambas voces no será abierto de nuevo… las bocas de decadencia se mantienen, la sangre ha llegado a las mesas y el hambre sigue sin huelga que la defienda.

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