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Con dos historias muy cercanas, era inevitable recordar “Eleanor Rigby” de The Beatles y pensar en morir sin que nadie se percate de ello. Por momentos somos tan poco visibles que nadie se detendría a mirarnos. Toda la gente solitaria, ¿a dónde pertenece?
La letra puede ser malinterpretada. “If” de Bread ha sido utilizada incluso para bodas en aras de una promesa de amor eterno. Sin embargo, hay una anécdota que modifica la manera de entenderla. La frase “simplemente volaríamos lejos” tiene otro significado.
Existe un punto de la vida que las ilusiones no existen… todo se puede convertir en realidad. “Dreams” de Van Halen inauguró la voz de Sammy Hagar en el grupo y es una canción que emana optimismo. De esto están hechos los sueños.
En un mundo marcado por los desengaños, la mejor cautela es no confiar. Thom Yorke, dedicó “Harrowdown Hill” a la muerte de David Kelly, un experto en armas que puso en duda las armas del Irak de Saddam Hussein. Una canción furiosa e inconveniente, pero necesaria.
“The Song is Over”, a pesar de ser de las favoritas de mi repertorio personal, ha llegado en momentos extraños desde aquellos días de secundaria. Hace algunas semanas, la canción de The Who resurgió y el verso “Searching for a one note, pure and easy, playing so free, like a breath rippling by” cobró sentido de nuevo.
¿Es posible crear un nuevo pecado? No es un asunto común: no puede ser de forma individual, debe contar con la complicidad. Bajo estos términos podemos ofrecer las instrucciones: pasión, guerra, sexo y religión. A ello evoca “Beautiful War” de Kings of Lion.
En la determinante urgencia del ahora, todo es posible esta noche. “Tonight, Tonight” de Smashing Pumpkins alude al cambio y su incertidumbre que conlleva: por haber perdido solo una vez tu momento, puedes quedarte para siempre.
The Rolling Stones compusieron “Salt of the Earth” y la volvieron de un cinismo crudo, la canción de Beggars Banquet ofrece un mensaje claro: hay una clase trabajadora que nunca tendrá el poder.
Al comenzar las primeras notas de la canción, comenzó a bailar en el pasillo del autobús; todos guardamos silencio y lo observamos. Cuando terminó estaba llorando: había pedido “(I Can’t Help) Falling In Love With You” en la versión de UB40.
La fe alimenta lo invisible, lamentamos no haber dado el último beso antes de que seamos el truco más cruel de nuestra mente. Tuvimos que estar locos… como el personaje de “John Wayne” de la banda Cigarettes After Sex.