La “Soul Tour” que había comenzado en octubre llegó a su conclusión en diciembre de 1974. En vez de tomar un descanso, David Bowie regreso de inmediato al estudio para seguir grabando temas que conformarían su próximo lanzamiento discográfico. Debemos recordar que las sesiones de grabación del álbum Young Americans fueron complejas y fructíferas, para diciembre el cantante ya disponía de bastante material nuevo. Las sesiones se remontaban a agosto en filadelfia. Las grabaciones de diciembre tuvieron lugar en los estudios Record Plant de Nueva York, bajo la producción de Tony Visconti.
Steve Schapiro, 1976
“Fascination” sería una de las canciones grabadas en las sesiones de diciembre. Bowie escuchó una composición del entonces joven y desconocido Luther Vandross titulada “Funky Music (Is a Part of Me)” y quedó profundamente impresionado por ella. La canción era parte del repertorio de la banda de Mike Garson (la cual era la telonera de los conciertos de Bowie durante la Soul Tour). Esta es la versión que Vandross grabaría para su propio álbum Luther de 1976:
Bowie retuvo a Luther tras la conclusión de la gira de 1974 (Vandross fue llevado al estudio y presentado a David por Carlos Alomar) y lo hizo partícipe de la sesiones de grabación del álbum Young Americans. Sin embargo, Bowie reconoció sus talentos como compositor y lo abordó con la petición de permitirle grabar su propia versión de “Funky Music”. La reacción de Luther fue de incredulidad:
“¿Qué quieres decir con permitirte grabar mi canción? Vivo con mi madre en el Bronx en un edificio en el cual el elevador apenas funciona ¿y me estás preguntando si puedes grabar una de mis canciones?”, expresó Vandross.
Steve Schapiro, 1976
De tal modo, “Fascination” se convertiría en un tema de co-autoria con el joven Vandross, el segundo en su carrera. Mientras que la esencia rítmica de la composición de Vandross fue relativamente mantenida de manera íntegra, la adición del clavinete tocado por Mike Garson eleva la pieza a un nivel y humor distintos, convirtiéndola en algo único aún dentro del contexto del álbum (ninguna de las demás canciones tiene una estructura o sonido similar) haciendo así a “Fascination” una de las infinitas curiosidades en el catálogo de Bowie. Si bien la estructura fue replicada, Bowie re-escribió por completo la letra, incorporando una nueva perspectiva a los compases de Luther.
Steve Schapiro, 1976
Mientras que la pieza de Vandross se centra en la pasión de un joven por la música, la versión de Bowie se centra en sí mismo y su eterna persecución por una musa inspiradora en forma de cualquier expresión artística. No sería la primera vez que Bowie le cantaría a la fascinación (recordemos “Changes”) ni la última (de manera más amarga, el tema sería explorado de nuevo años más tarde en “I Can’t Read” con Tin Machine) por nombrar algunos ejemplos.
En palabras del propio Vandross, Bowie titularía la pieza “Fascination” ya que consideraba pretencioso que un artista de rock n’ roll tuviera una canción llamada “Funky Music”. No sería la primera vez que Bowie sería muy consciente de sí mismo. El propio Bowie se referiría a su álbum como “Soul de plástico.” Tal fue la convicción de Bowie por la pieza, que “Fascination” llegó a ser uno de los títulos tentativos del disco en un punto de las grabaciones.
Steve Schapiro, 1976
Las sesiones de grabación del álbum Young Americans eran el marco perfecto para que Bowie escribiera una letra sobre su perspectiva respecto a la inspiración y la fascinación. Ambas abundaban durante las grabaciones, a tal grado que Bowie diría “Justo lo que necesitaba…otra maldita canción” al término de una exitosa sesión. Un problema que seguramente muy pocos artistas podrían enfrentar: excedente de material de calidad. Bowie impregnó la pieza con un aura de vida nocturna y sueños de día, un ritmo de trabajo imparable, creatividad desbordada y una concentración implacable en los temas de interés personal.
“Every time I feel fascination
I just can’t stand still, I’ve got to use her”
En efecto, este fue un periodo sumamente fértil para Bowie, como puede evidenciarse por las decenas de letras escritas a mano, bosquejos, guiones, ideas y grabaciones que Bowie amasaba día tras día. Su concentración no se limitaba al álbum, también estaba haciendo diseños para la portada, el libreto para una posible película, el borrador para un libro tentativo, storyboards para una película más decenas y decenas de dibujos.
Steve Schapiro, 1976
Al contemplar esto, la letra de “Fascination” cobra mucho significado. La inspiración llegaba a Bowie y él se ponía manos a la obra de inmediato. La canción funge como una declaración de Bowie sobre su ética laboral: no dejar escapar ninguna idea y siempre plasmarla. Nunca dar a una musa por sentado, recibir todo lo que tenga que dar cada vez que visita sus pensamientos.
“(Sure ’nuff) fascination
(Takes a part of me) takes a part of me
(Can a heart beat) can a heart beat
(Live in a fever) live in a fever?”
Esta parte de la canción parece reflejar como su fascinación por el trabajo iba de la mano con un estilo de vida insostenible, el cual lo llevó a los límites de sí mismo de manera tanto física como mental. ¿Puede un cuerpo seguirle el paso a la fiebre provocada por la fascinación? Una fascinación por la música, cine, lectura y diversas expresiones que demandaba el tipo de atención y disciplina que exigen noches consecutivas sin dormir, evidentemente respaldadas por sustancias cuestionables.
“(I can’t help it) I can’t help it
(I’ve got to use her) got to use her
(Every time, ooh)
Fascination comes around”
No hay excepciones. Si la inspiración llega, debe ser plasmada en una canción, una letra o un dibujo, sin importar la hora – sin importar a lo que Bowie debiera someter a su cuerpo con tal de seguir trabajando.
“I know that people think
That I’m a little crazy”
Una frase bastante reveladora dentro del contexto de la imagen de Bowie en aquel entonces. Si bien, sus intereses eran específicos y se recluía durante días y semanas enteras en su residencia, lejos de cualquier contacto, Bowie estaba al tanto de la percepción que el mundo exterior tenía acerca de él.
Steve Schapiro, 1976
La música de “Fascination” es compleja, llena de capas y de detalles que se pueden descubrir y re-descubrir con cada escucha. Los versos están condimentados con inflexiones vocales diversas de parte de Bowie. Desde lo grandilocuente hasta lo frágil, lo que sea necesario para dar énfasis a cada palabra. El coro, sin embargo, es donde la pieza estalla en una cacofonía de melodías, armonías y sonidos.
Con el respaldo de su ensamble de coristas que consistía en Ava Cherry, Luther Vandross, Robin Clark, Anthony Hinton y Diane Sumler, el escucha es bombardeado por la abrumadora selección de voces que acompañan a la voz de Bowie a lo largo de la pieza. Carlos Alomar contribuyó su inigualable talento en la guitarra, Mike Garson con sus idiosincrasias en el piano y clavinete, el mítico Emir Kassan en el bajo y Andy Newmark en la batería acompañado por Pablo Rosario en la percusión. Pero uno de los elementos más importantes es por supuesto, el saxofón cortesía de David Sanborn. Un instrumento que es tan protagonista del álbum como lo es la voz de Bowie y “Fascination” no es la excepción. Inclusive hay momentos en los que el saxofón, la voz de Bowie y su potente coro parecen debatirse acaloradamente el reflector principal.
La letra escrita a mano de “Fascination” revela los diversos cambios que Bowie haría a la letra final de la pieza.
Steve Schapiro, 1976
“Fascination” fue incluida en la caja retrospectiva “Sound + Vision” de 1989 lanzada por Ryko así como en la reedición de Young Americans de 1991 en una mezcla distinta a la del álbum original (inmediatamente distinguible por un fuerte eco de reverberación al comienzo de la canción) dicha versión sería reemplazada por la mezcla original en subsecuentes ediciones de la caja y del álbum. Es sabido que existen diferentes tomas de “Fascination” que forman parte de las sesiones de grabación de Young Americans que aún permanecen inéditas.
La canción fue considerada para ser lanzada como el tercer sencillo del álbum Young Americans pero el plan fue descartado tras la llegada del éxito avasallante “Golden Years”. Con dicho tema, Bowie había pasado la página efectivamente y Young Americans había quedado obsoleto en su lista de intereses.
La evidencia de que “Fascination” estaba en proceso de ser lanzada como sencillo se encuentra en dos piezas de memorabilia: una hoja insertada en algunas copias de Young Americans ostentando una imagen extraída de la legendaria sesión de fotos con Steve Schapiro de 1975 en la que Bowie está enfundado en su traje de rayas dibujadas con gis, mientras que realiza un bosquejo del árbol de la vida en el suelo.
Steve Schapiro, 1976
La imagen promocional incluye un breve repaso de algunos títulos discográficos disponibles hasta el momento así como el encabezado “Fascination: it’s what made Bowie famous” Por otro lado, las partituras de la canción también fueron impresas con la misma imagen en la portada y diferente tipografía. ‘¿Habría sido “Fascination” un sencillo exitoso? La realidad es que nunca lo sabremos.
Steve Schapiro, 1976
Steve Schapiro, 1976
“Fascination” nunca fue interpretada en vivo, aunque llegó bastante cerca: fue considerada para el setlist de la presentación de Bowie en Live Aid 1985, pero reemplazada al final por la infinitamente más popular “Modern Love”. El prospecto de Bowie cantando este tema frente a un estadio repleto es ciertamente fascinante. Sin embargo, cualquier interés que podría haber tenido por reevaluar temas de Young Americans quedaría en el olvido. Salvo el tema que da nombre al álbum interpretado durante la gira Sound + Vision de 1990 más la estancia permanente del éxito “Fame” durante el resto de su carrera, ninguna otra canción de Young Americans sería resucitada por Bowie en algún concierto o gira (y no fue por falta de insistencia, músicos como Gail Ann Dorsey y Carlos Alomar con frecuencia le sugerían que incorporara temas como “Win” a su repertorio) pero nunca sucedería y “Fascination” se quedaría relegada como un tesoro oculto en su álbum correspondiente.
Si “Fascination” había pasado desapercibida para ti hasta el día de hoy, este es el momento ideal de encontrarte de nuevo con ella y permitirle deleitar tus oídos con su decálogo de sonidos.
