¿Y si los humanos fuéramos una larga conexión de tristezas?, dijo.
La frase me impactó al momento de leerla. El mensaje era que, durante la vida, como un inevitable e irónico destino, somos una colección de sentimientos de desánimo, pérdida o desesperanza. Todos ello, experimentado por situaciones de decepción, pérdida o frustración… o incluso de obsesiones o la larga nostalgia a la que nos remite la vida del otro.
Por mi parte, siempre he pensado en que más bien somos una secuencia de sucesos aleatorios que representan la naturaleza impredecible y caótica de la existencia humana, qué eventos fortuitos pueden alterar el curso de la vida en formas inesperadas.
Hay variables en la vida de las cuales no podemos tener control o previsión y todo está gobernado por el azar, la incertidumbre y la contingencia.
La frase de ella estaba del otro lado del puente: la noción de un destino escrito y predestinado implica que todos los eventos de la vida están determinados de antemano. Que, cada acontecimiento, por caótico que parezca, tiene un propósito y una razón dentro de un esquema mayor.
Surgieron preguntas que nacen de nuevo ¿Qué hubiera pasado si ella no me hubiera dicho esa frase? ¿Si en aquella ocasión no hubiera caminado al otro lado? Toda la vida pudo haber sido diferente, pero… algo cambió.
“Something Changed” de Pulp ha sonado en mi cabeza desde ese momento.
“Something Changed” es una canción de la banda de britpop Pulp, lanzada en su álbum de 1995, Different Class. Fue escrita mucho antes en la existencia de la banda, pero revivida para las sesiones de ese álbum. Habla precisamente de la naturaleza aleatoria de cómo suceden los eventos importantes en la vida.
“Fue escrita originalmente hace unos 12 años (1983). Mi hermana cantó una versión anterior, pero tenía palabras diferentes. Nunca la usé, y luego simplemente la recordé. Como había sido escrita hace tanto tiempo, me hizo preguntarme qué estaba haciendo entonces.
“Deduje que debía haber sido escrita bastante cerca de cuando conocí a una chica. Es solo una pregunta, en realidad. Si no hubiera salido y conocido a esta persona en particular en este club nocturno en particular, y formado una relación con ella, ¿cuán diferente habría sido mi vida? Así que no se trata realmente del destino, se trata más bien de la aleatoriedad de las cosas. Lo cual me gusta. Como he dicho antes, eso es lo principal que siento que falta en mi vida. Lo peor de tener un horario y un cronograma es que hay menos posibilidades de que sucedan cosas inesperadas”, explicó el vocalista del grupo, Jarvis Cocker.
“When we woke up that morning we had no way of knowing
That in a matter of hours we’d change the way we were going
Where would I be now, where would I be now if we’d never met?
Would I be singing this song to someone else instead?
I don’t know but like you just said
Something changed”
Para mí, una de mis canciones favoritas. A veces me ofrece consuelo ante el libre albedrio y a veces sobre la tensión que ofrece un destino determinado. La dialéctica de las “sliding doors”.
Y la pregunta hoy es ¿Qué pasaría si ella no estuviera leyendo estas líneas en estos momentos? ¿Qué cambiaría? ¿Dónde estaríamos ahora? ¿Dónde podríamos estar? ¿Sería 1: 30 una esperanza o al recuerdo de una lágrima que jamás se derramó?