Ante una realidad que nos abruma a cada momento, ¿cómo debemos agradecer las lecciones que nos da?
Es complicado porque la realidad tiene una duración exacta de tres segundos y la respuesta para entenderla llega cuando se ha vuelto pasado… el pasado muchas veces irreversible.
Hace algunas horas, en una charla con una enfermera, recordamos anécdotas de los angustiantes momentos que regalan las enfermedades, aquellas que no sólo afectan al paciente, sino que son una descarga eléctrica y emocional para los llamados cuidadores.
La conclusión no llegó en esa plática casual. La conclusión me la dio una persona desconocida hace casi un año cuando lanzó la frase “Nada es carga, todo es aprendizaje… sólo que a veces no nos damos cuenta de las grandes clases que nos da la vida”.
Hoy agradezco muchas cosas… espero tener la sabiduría para hacer en tiempo real y presente.
Gracias.
En 1995, Alanis Morissette, de 21 años, irrumpió en el panorama musical con el álbum Jagged Little Pill con sencillos como “Ironic”, “You Oughta Know” y “Hand in My Pocket”, La canadiense ganó, incluso, cinco Grammys.
Detrás del escenario la historia era otra. Todo el éxito desencadenó un estrés postraumático que se mezcló con la cúspide de la fama de Morissette. A ello, se sumó además el regreso de la anorexia y bulimia que había sufrido cuando tenía 16 años. Todo porque su discográfica le dijo que estaba subiendo de peso.
“En los Ángeles, (Estados Unidos), donde vivo, todo gira alrededor de estar perfecta. La belleza ahora se define por los huesos que sobresalen de tu escote. Que ese sea el estándar para las mujeres es realmente peligroso”, comentó en el 2016 al diario The Guardian.
En 1998, meses antes de la publicación de su segundo álbum, tomó una pausa y se fue en retiro espiritual en India. Ahí nació “Thank U” que sería el primer sencillo de su segundo álbum, Supposed Former Infatuation Junkie.
“Empecé a cuestionarlo todo y me di cuenta de que en realidad todo era una ilusión y me daba miedo porque todo en lo que había creído se estaba disolviendo frente a mí y había una especie de muerte, una muerte realmente hermosa en última instancia, pero al principio muy aterrador, así que me detuve.
“Me detuve por primera vez y me invadió un gran sentido de compasión por mí misma primero, y luego, naturalmente, eso se tradujo en mi sentimiento y compasión por todos los que me rodeaban y una enorme cantidad de gratitud que nunca antes había sentido en este grado.
“Y es por eso que tuve que escribir esta canción, ‘Thank U’, porque tenía que expresar lo emocionante que era esto y lo aterrador que era y todas estas oportunidades para que definamos quiénes somos”, relató la cantante.
Cierto es.
“Thank you, India
Thank you, terror
Thank you, disillusionment
Thank you, frailty
Thank you, consequence
Thank you, thank you, silence”
Gracias, terror.
