La llamada “Nueva Normalidad”, los semáforos estatales, la apertura de establecimientos y el desconfinamiento en México se ha conducido mediante niveles bajos de pruebas por covid-19.
Según el portal www.ourworldindata.org, México tiene un alto promedio de casos positivos con un menor número de pruebas. Este portal se alimenta de los datos proporcionados por el Gobierno de México en sus portales digitales.
El pasado 6 de julio, en México se aplicaron 0.07 pruebas por cada mil habitantes, es una ligera tendencia a la baja, pues un día anterior, el 5 de julio, se aplicaron 0.08 por cada mil personas. Estados Unidos aplicó, esos días, 2.1 pruebas diarias por cada mil habitantes.
Comparado con el resto de los países, el promedio de pruebas aplicadas en México, desde que se detectó el coronavirus el pasado 27 de febrero, es de 4.83 por cada mil habitantes. Un país como Rusia, con una población casi similar, lleva aplicadas 159.61 desde que llegó la enfermedad a su territorio.
“Para poder controlar adecuadamente la propagación del virus, los países con brotes más generalizados deben realizar más pruebas.
“Una manera importante de entender si los países están haciendo pruebas suficientes es mirar la proporción de pruebas que arrojan un resultado positivo, conocido como la tasa positiva”, se explica.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha sugerido una tasa positiva del 3 al 12 por ciento como punto de referencia de pruebas adecuadas. México tiene rangos hasta del 50 por ciento de ella. Es decir, pocas pruebas con alta positividad.
La OMS ha sugerido de 10 a 30 pruebas por caso confirmado de covid-19 para mantener puntos de referencia correctos sobre contagios. México aplica 1.61 pruebas por cada caso positivo.
En materia de pruebas y políticas de seguimiento, el país solo aplica pruebas a quienes tienen síntomas y grupos muy focalizados. Otros países hacen pruebas en general para detectar casos asintomáticos.
“La prueba es nuestra ventana a la pandemia y cómo se está propagando. Sin pruebas no tenemos forma de entender la pandemia”, asegura el portal, cuyas publicaciones son desarrolladas por investigadores asociados a la Universidad de Oxford.
Hugo López-Gatell Ramírez, Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, ha descartado extender el número de pruebas en México.
“En México estamos interesados en utilizar eficientemente las pruebas de laboratorio para guiar las acciones de salud pública. En muchos de los otros países, por razones distintas, se atendió una inquietud del deseo personal de hacerse la prueba”, dijo el pasado 22 de junio.
Según el último corte, México tiene 317 mil 635 casos confirmados de covid-19 y 36 mil 906 muertes. El país se encuentra en cuarto lugar en fallecidos debajo de Estados Unidos, Brasil y Reino Unido.
Hasta el pasado 6 de julio, en México se aplicaban diariamente 0.07 pruebas por cada mil habitantes, es una ligera tendencia a la baja, pues un día anterior, el 5 de julio, se habían aplicado 0.08 por cada mil personas.
Comparado con el resto de los países, el promedio de pruebas aplicadas en México, desde que se detectó el coronavirus el pasado 27 de febrero, es de 4.83 por cada mil habitantes.
En materia de pruebas y políticas de seguimiento, el país solo aplica pruebas a quienes tienen síntomas y grupos muy focalizados. Otros países hacen pruebas en general para detectar casos asintomáticos.
