Cada paso puede ser una tragedia.
En los últimos años, con una pandemia frente a nosotros, cada respiración podía ser una tragedia… y, en algunos casos, lo fue. En horas nos vimos envueltos en espirales que modificaron la forma de convivir con los demás, de analizar quiénes somos y descubrir, en el mejor de las ocasiones, que una micropartícula podría, literalmente, asfixiarnos hasta la muerte.
No fue igual para todos, personas caminarán rumbo a su muerte sin percatarse de lo que la tragedia permitió: respirar y vivir cada momento. ¿Para ellos? el olvido momentáneo, solo marchitar su mente en celebración de ellos mismos. Justamente ahora, alguien tiene pensamientos equivocados.
Los problemas mundiales, y personales, de 1983 y 1990 son vistos, por lógica, como una lupa diferente ante lo que vivimos ahora. Ahí están, persisten y nadie puede juzgar el pasado con el conocimiento del presente.
En 1983, Eddie Van Halen compuso la música de “Right Now” en la era de David Lee Roth como vocalista de Van Halen. En palabras del guitarrista, nadie quiso saber de esa melodía hasta años después.
Sammy Hagar, cantante que sustituyó a Lee Roth, relató que escribía la letra de una canción en el estudio un día muy entrada la noche y escuchó que Eddie estaba trabajando su composición al piano.
“Estábamos escribiendo la misma canción”, dice Hagar, quien asegura que es la mejor que hizo para el grupo, pues estaba cansado de hacer letras de “sexo baratas”.
La letra es un concepto en sí mismo: reflexiona sobre lo que pasa al instante que se escucha… o en el momento que se leen estas líneas. El mensaje final es vivir cada momento con la condición de no tener miedo al cambio.
“Right Now” fue incluida en el álbum “For Unlawful Carnal Knowledge” (F. U.C.K. por sus siglas) y su video, que reflexionaba sobre lo que ocurría en ese momento en el mundo, fue motivo de una pequeña crisis en la agrupación.
Sammy Hagar se opuso a que salieran subtítulos como parte del concepto de la música.
“Escribí la mejor letra que he escrito en Van Halen, estoy tratando de mejorar la imagen de esta banda con letras donde finalmente no somos solo una banda de fiesta que puede tocar instrumentos, y ¿quieren poner palabras debajo? ¿Por qué no usan las palabras que escribí? Son grandes palabras. Es una declaración. ¡Va a ser confuso!”, expresó sobre ello.
Hagar se retiró a Carolina del Sur y no devolvió las llamadas telefónicas de nadie hasta que el presidente de Warner, Mo Ostin, lo llamó y lo convenció de que lo hiciera.
Durante la filmación, contrajo neumonía y tenía fiebre, lo que intensificó su ira por el video. Según Hagar, la escena en la que se aparta del micrófono y se niega a cantar, y el final del video en el que da un portazo al camerino no fueron escenificados: estaba realmente enojado. El video ganó premios… y el vocalista aceptó que estaba bastante impresionado con el resultado de todo.
El concepto ha sido utilizado varias veces por el grupo y sus solistas en ocasiones posteriores para que el mensaje siga vigente.
Justamente ahora algunos dibujan en el aire dibujos, otros deciden ser viento; otros, alas. El sueño nunca muere… es nuestra esencia.