Ante la llegada del Huracán Otis a las costas de Acapulco, el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador ignoró el Sistema de Alerta Temprana para Ciclones Tropicales (SIAT), un protocolo existente desde 2000 para alertar a la población sobre tormentas y huracanes.
El SIAT es un sistema que puede conocerse en http://www.preparados.gob.mx/SIAT-CT/ y es manejado por la Coordinación Nacional de Protección Civil, actualmente encabezado por Laura Velázquez Alzúa, cuya formación es en historia y arte y pertenece al grupo político de René Bejarano.
El objetivo del sistema es alertar a la población sobre el fenómeno meteorológico para mitigar sus efectos y detonar respuestas coordinada del Sistema Nacional de Protección Civil, que es la actuación de servicios públicos y privados para intervenir en una situación de emergencia.
Como aspectos técnicos, el SIAT se basa en tablas de acercamiento y alejamiento del fenómeno que considera la intensidad del ciclón según dos escalas, velocidad, distancia con respecto a la costa y tiempo estimado de llegada.
En el caso de Otis, en una línea de tiempo realizada por el periodista Carlos Loret de Mola en el canal Latinus, se contabilizaron 13 alertas que se dieron entre el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos y el Sistema Meteorológico Nacional 28 horas antes de la tragedia en Acapulco.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos emitió desde las 3: 18 horas del lunes 23 de octubre un total de 8 alertas que iban desde una alerta temprana por Otis hasta la advertencia de un huracán peligroso con efectos devastadores.
Por su parte, el Sistema Meteorológico Nacional, que depende de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y cuya cabeza de sector es la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) emitió cinco alertas desde las 3:15 horas del martes 24 de octubre.
Según la tabla del SIAT, bajo una serie de escalas, había un peligro medio en promedio. Según un documento interno del sistema en propiedad de este portal, ese semáforo obligaba a:
- Notificación a los integrantes del Sistema Nacional de Protección Civil federal, estatal y municipal.
- Instalación de los centros estatales de coordinación y comunicación y los consecuentes locales en los municipios susceptibles de afectación.
- Valoración para instalar los Consejos Estatales y Municipales de Protección Civil.
- Inicio de coordinación operativa.
- Preparación de los posibles refugios temporales y asignación de responsabilidades de ellos.
- Considerar evacuación en islas e instalaciones petroleras marítimas.
- Reforzamiento de campañas en medios de comunicación sobre la actuación a seguir.
- Alertamiento desde medios de comunicación sobre el fenómeno y el impacto.
- Valoración e inicio de despliegue de personal y recursos.
Nada de ello se hizo.
“Si ese sistema hubiera sido tomado en cuenta, se pudo haber alertado por amenaza de ciclón tropical, independientemente de su categoría. De la misma forma, debería de estar vigente una declaratoria de desastres que abriera el acceso al Fonden (Fideicomiso Fondo de Desastres Naturales). Esto debería estar financiando la reconstrucción. Pero, ¿cuál Fonden?”, explicó un consultor especializado en Protección Civil.
Fuentes:
http://www.preparados.gob.mx/SIAT-CT/
https://x.com/CarlosLoret/status/1719464673437782078?s=20