¿Serán los momentos de nuestra vida suficientes para contar por lo menos un par de historias trágicas de ella?
Si bien cada paso puede ser una tragedia, cada vida puede convertirse en una parálisis, algo terrorífico, ¿la explicación? Las cicatrices que la vida deje, eso que nos hace únicos, puede ser un lastre… más si es físico.
“Mmm Mmm Mmm Mmm” engloba varias historias. Más de las que se pudiera uno imaginar en su corta duración. La canción es de 1993 y pertenece a la banda canadiense Crash Test Dummies.
Esta canción cuenta la historia de tres niños cuyas extrañas experiencias les parecen normales… pero no lo son. Cada estrofa se centra en uno de estos niños, pues el vocalista, Brad Roberts, los conocía directa o indirectamente, cada uno describe el aislamiento y el sufrimiento de un niño diferente, dos de los cuales tienen una anomalía física.
En el primer verso, un niño resulta herido en un accidente automovilístico y falta a la escuela por un período prolongado; cuando regresa a clase, su cabello ha cambiado de color de negro a blanco brillante.
En el segundo verso, una niña se niega a cambiarse de ropa en presencia de otras niñas debido a las marcas de nacimiento que cubren su cuerpo. El tercer hijo es un niño cuyos padres exigen que regrese directamente a casa después de la escuela.
“Mi tío abuelo, que estuvo atrincherado en una isla cerca de Japón durante la Segunda Guerra Mundial, pasó una noche atrincherado, escuchando a los japoneses gritar en su inglés entrecortado lo que le harían cuando lo capturaran. Estaba aterrorizado. En su caso, solo una parte de su cabello se volvió blanco. De todos modos, de ahí surgió eso, en el primer verso”, relató el cantante.
El tercer verso narra cierto fanatismo religioso.
“La verdadera inspiración fue una niña que yo conocía, sus padres eran cristianos pentecostales, y solían llevarla a la iglesia todas las semanas y hacer lo que ellos llaman ‘hablar en lenguas’.
“(…) Dicen que el espíritu ha entrado en su cuerpo y lo que están diciendo es simplemente una transmisión de ese espíritu. Ya no son ellos mismos los que hablan, es la palabra santa. (…) Para mi amiga, cuando era una niña pequeña que iba a la escuela, esto le pareció aterrador”, agregó Roberts.
La onomatopeya “Mmm Mmm, mmm, mmm” es una especie de reclamo a los padres para que vean ¿por qué sus hijos están siendo marcados de por vida?
No hace falta decirlo, las experiencias a veces sin cicatrices y modifican todo.