En el laberinto de la mente solitaria… amar es una parálisis también.
Normalmente, emerge de un vínculo intenso físico que se complementa con ilusiones de mentalidades gemelas. Luego uno, o ambos, se convierten en almas perdidas, envueltas en su propia obsesión.
Nos paralizamos porque encontramos en otro la fuente del anhelo. Y así, poco a poco, en el laberinto de la mente solitaria, nos congelamos alrededor de esa presencia, cada pensamiento, cada aliento, dedicado a su existencia.
Pero, como una sombra que se alarga, pronto nos convertimos en una prisión invisible. Consumidos por la obsesión, perdemos el control de vida. El amor se vuelve tortura porque cada palabra suya es una orden divina. Los días son un ciclo repetitivo de espera y desesperación.
En una de sus múltiples interpretaciones, “Minerva” de Deftones, de su álbum homónimo, intenta retratar la inmovilización a causa del amor obsesivo.
Después del exitoso White Pony, Deftones comienza a trabajar en su continuación. El grupo estaba desconcertado, pues habían tenido mucho éxito y al mismo tiempo habían gastado mucho dinero. Se tomaron su tiempo para grabar.
“Llevamos esa mentalidad al siguiente nivel con el disco homónimo. Y realmente luchamos con nuestra ética de trabajo y ese disco nos llevó casi dos años, el doble que White Pony”, explicó el vocalista Chino Moreno.
Moreno no atravesaba por el mejor de sus momentos: bebía demasiado y se aleja creativamente del proceso, además Chi Cheng, el bajista, estaba sumido en la adicción a las drogas después de su divorcio.
“Hacer Deftones fue probablemente el momento más oscuro de mi vida. Estaba pasando por un divorcio de mi esposa, con quien había estado desde que tenía 19 años. Entré en un período en el que intenté usar drogas y alcohol como inspiración, porque mi vida hogareña era un torbellino”, reconoció Moreno.
Con todo ello, el álbum de 2003 debutó en el número dos y sigue siendo su álbum con las listas más altas hasta la fecha. “Minerva” fue el primer sencillo. Trataron de olvidar el bache creativo de la banda y siguieron con el siguiente álbum.
De “Minerva”, Chino Moreno ha dicho poco.
“Fue una de mis canciones favoritas del disco. Prácticamente, desde Adrenaline hemos estado librando una batalla cuesta arriba con algunos de nuestros fans de la vieja escuela que simplemente nos aman por la parte agresiva de nuestra banda. Por mucho que me guste también, he tenido esta conversación muchas veces”, no siempre estoy ahí, no siempre estoy enojado, la vida no siempre apesta”, dijo.
La canción se ha interpretado como la voz de un hombre que se encuentra inmovilizado ante una mujer, que lo deja entumecido, que le agradece su voz. La otra es que es una canción que parece ahondar en el profundo impacto que la música puede tener en el espíritu humano.
La letra sugiere una sensación de asombro paralizante que surge al experimentar una canción poderosa, una que puede hacer que una persona se arrodille en una mezcla de reverencia y entrega. Al igual que una mujer.
La obsesión teje sus hilos, atrapa en una red de miedo y posesión, es incapaz de romper los lazos que unen, el dilema es angustiante. En medio de la oscuridad de nuestra propia creación, el amor paraliza.