“No podemos tener la irresponsabilidad de seguir pensando en el crecimiento de Metro”, dijo Florencia Serranía Soto, recién nombrada directora del Sistema de Transporte Colectivo Metro en 2004.
Serranía Soto, quien estaba frente de los transportes eléctricos de la Ciudad de México, fue elegida para el cargo en febrero de ese año por el entonces Jefe de Gobierno, Andrés Manuel López Obrador. Sustituyó a Javier González Garza, quien había tenido diferencias con el tabasqueño por exponer las fallas y deficiencias del sistema.
Apenas llegando, la funcionaria capitalina restringió la información del contrato multianual de 45 trenes. Argumentó que ponía en riesgo la propiedad intelectual y la seguridad de ellos. El monto del contrato fue de 5 mil millones de pesos.
El 18 junio del 2004, bajo su gestión, se ocultó el descarrilamiento de un tren en la terminal Observatorio: una conductora, que no respetó la señal de alto total, provocó un accidente que involucró tres vagones del convoy motrices 487-486 y quedaron montados en las barras de guía. El hecho solo se dio a conocer de manera interna para no avisar a la compañía de seguros, evitar el pago de los deducibles y hacer reparaciones por cuenta del propio sistema más económicas.
El 20 de diciembre de 2004 un vagón de la Línea 2 se descarriló; al día siguiente, una falla dejó encerrados pasajeros en un convoy de la Línea 8 durante 45 minutos entre las estaciones Escuadrón 201 y Aculco. El accidente fue por una baja en el suministro eléctrico.
“Estos incidentes ocurren cada año varias veces. Muchas veces ocurren dentro del patio de maniobras y no es conocido, o por las noches en el acomodo de los trenes y no se da a conocer al público”, expresó la funcionaria sobre ello.
Otro tren de la Línea 2 se descarriló en la estación terminal Cuatro Caminos el 11 de enero de 2005.
Fue el año en el que López Obrador anunció su primera búsqueda por la Presidencia de la República. El día que lo anunció en el Zócalo capitalino, se le preguntó a Serranía cuando iniciaría la actividad del Metrobús. “Estamos de luto, cabrón”, fue su respuesta.
En 2005 comenzó su relación con la Línea 12… con irregularidades: pese a que se asignaron 103 millones para hacer el estudio técnico de construcción, las obras no se reportaron en la cuenta pública de ese año. El informe del Sistema de Transporte Colectivo no menciona el estudio y los recursos previsltos para ello.
Al año siguiente, 2006, además de ser denunciada ante la Fiscalía para Delitos Electorales (Fepade), junto con otros perredistas, por supuesto uso de recursos públicos a favor del PRD, dejó el puesto.
De acuerdo con su perfil de Linkedin ha sido investigadora en el Instituto de Ingeniería de la UNAM y CEO de la firma Urban Travel Logistics. Esta compañía se encargaba de la operación del tren turístico Puebla-Cholula y de los Centros de Transferencia Modal (Cetram) de Cuatro Caminos y Ciudad Azteca… y colabora actualmente en el Tren Maya.
En enero del 2018, con Claudia Sheinbaum como Jefa de Gobierno de la CDMX, regresaría a su antiguo cargo y enfrentaría acusaciones de todo tipo:
Subejercicio de recursos durante 2019, dejó de publicar informes operativos con avances sobre la mejora el del servicio, fallas en escaleras eléctricas, flamazos en las vías, un muerto y 41 heridos por una falla en el tren 33 de la Línea 1, un incendio en la subestación del edificio central del Metro y dejar vacío el cargo de Subdirector de Mantenimiento durante un año.
Este 3 de mayo, se desplomó la Línea 12 en un tramo elevado que dejó 26 muertos y 51 heridos. Florencia Serranía Soto se ha mantenido en silencio, no ha usado su Twitter desde el 5 de abril. Ella es solo la Directora del Metro y sigue sin aparecer.