La consulta popular para votar si se está a favor o en contra de los expresidentes de México es falsa.

En primer lugar, la pregunta no menciona a Carlos Salinas, Ernesto Zedillo, Felipe Calderón o Enrique Peña. El cuestionamiento es:

“¿Estás de acuerdo o no en que se lleven a cabo las acciones pertinentes, con apego al marco constitucional y legal, para emprender un proceso de esclarecimiento de las decisiones políticas tomadas en los años pasados por los actores políticos, encaminado a garantizar la justicia y los derechos de las posibles víctimas?”.

No hay mención de los exmandatarios del país debido a que la Suprema Corte de Justicia de la Nación quitó los nombres, con seis votos a favor y cinco en contra, para no afectar el debido proceso, además de que la ley no se puede sujetar a una consulta.

“La consulta no debe interpretarse en el sentido de que está encaminada a que las autoridades de impartición y procuración de justicia cumplan o dejen de cumplir con sus atribuciones, pues estas son de ejercicio obligatorio”, fue la justificación del tribunal máximo de la nación.

En llanas palabras: la ley no se consulta.

La pregunta original era:

“¿Está de acuerdo o no con que las autoridades competentes, con apego a las leyes y procedimientos aplicables, investiguen, y en su caso sancionen, la presunta comisión de delitos por parte de los expresidentes Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo Ponce de León, Vicente Fox Quesada, Felipe Calderón Hinojosa y Enrique Peña Nieto antes, durante y después de sus respectivas gestiones?”

No hay tal juicio a los expresidentes y la consulta, que sí es constitucional, se limitará a una pregunta simple cuya respuesta está casi otorgada de antemano: nadie puede negarse a esclarecer ciertas decisiones políticas… es cómo preguntar si alguien quiere que no haya gente mala.

La consulta no es vinculante a ninguna acción legal a menos de que esta se inicie en un Ministerio Público y se presenten las pruebas de ley y se inicie un proceso.

Supongamos que se logra inicia un proceso… en caso de enjuiciar a los expresidentes solo se podría iniciar proceso al sexenio de Peña Nieto y al último año de Calderón. Así lo marca la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en el Artículo 114:

“La ley señalará los casos de prescripción de la responsabilidad administrativa tomando en cuenta la naturaleza y consecuencia de los actos y omisiones a que hace referencia la fracción 3 del artículo 109. Cuando dichos actos u omisiones fuesen graves los plazos de prescripción no serán inferiores a siete años”, dice la constitución en su apartado sobre las responsabilidades de los servidores públicos.

Es tal la farsa que su propio impulsor, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, no participará.

“Punto final, vamos hacia adelante, yo no voy a participar en la consulta ni voy a votar porque se enjuicie a los presidentes”, dijo el tabasqueño este martes en su conferencia matutina.

Y miente de nuevo:

“Es una pregunta que se puede traducir de manera sencilla: ¿Quieres que se investigue y, de conformidad con la ley, se juzgue a los expresidentes Carlos Salinas, Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto? Sí o no. Es otro texto, pero en esencia es eso”, dijo previamente.

La pregunta no es tal. Los supuestos delitos imputables a los exmandatarios, en la cabeza de López Obrador, son tan ambiguos como la consulta misma: los bienes entregados de la nación de Salinas, el Fobaproa de Zedillo, el engaño al pueblo de Fox, la guerra contra el narco de Calderón y la corrupción de Peña Nieto.

¿Hechos investigables? Sí.

¿Pruebas presentadas? Ninguna.

¿Desvió de la atención de López Obrador? Sí… como su anuncio de la rifa del avión sin el avión, su nueva sección de “fake news” en su conferencia matutina, sus ataques a adversarios que toman la forma de quien lo contradiga. No importa la magnitud del dislate, sus seguidores serán fieles a la sinrazón.

Por cierto… la consulta del 1 de agosto costará 520 millones de pesos que pagarán todos los mexicanos. Los caprichos inútiles son caros, él también lo es.

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